A partir des septiembre, las puertas del cine Villa Olímpica se vuelven a abrir para ofrecer una alternativa más a la oferta fílmica en la Ciudad de México. Representa, sobre todo, un nuevo espacio para el cine mexicano.
Durante este mes, el cine Villa Olímpica ofrecerá un ciclo de cine nacional contemporáneo, conformado por títulos de reciente manufactura, la mayoría apoyados con recursos que ofrece el Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine).
Se exhibirán películas como Güeros, de Alonso Ruizpalacios; El paciente interno, de Alejandro Solar; Las oscuras primaveras, de Ernesto Contreras; Carmín tropical, de Rigoberto Perezcano; y Alicia más allá del abismo, de Abril Schmucler.
Completan la programación Viento aparte, de Alejandro Gerber; Los bañistas, de Max Zunino; Somos Mari Pepa, de Samuel Kishi Leopo; y La delgada línea amarilla, de Celso García, entre otras cintas.
El cine Villa Olímpica fue construido con motivo de los Juegos Olímpicos, celebrados en México en 1968. El gobierno de la Ciudad de México invirtió en la infraestructura adecuada para albergar a los atletas: la Villa Olímpica Libertador Miguel Hidalgo, conjunto habitacional que contaba con todas las comodidades como gimnasios, canchas de futbol y un cine.
Con la remodelación, este lugar cuenta ahora con 440 butacas. Se encuentra en Avenida Insurgentes Sur 3493, dentro de la Villa Olímpica, en la delegación Tlalpan, responsable de la recuperación de este espacio al que se puede llegar en metrobús, automóvil o bicicleta
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